Las prisas y la avaricía pueden jugarle una mala pasada a Microsoft. El gigante de Redmond está infravalorando un mercado en auge dentro del desarrollo de aplicaciones en Internet, el de las RIA, léase Rich Internet Applications o todas aquellas webs/aplicaciones llenas de videos, animaciones, sonidos, experimentos sobre interfaces o incluso 3D, y en general cualquier artificio audovisual en movimiento.
El lanzamiento de Windows Vista cada vez parece haber sido más precipitado. Hardware y software que no funciona, drivers inestables o inexistentes, rendimiento más que dudoso… pero además, ha supuesto el desperdicio por parte de Microsoft de una oportunidad de oro para acabar acabar con la aplastante hegemonia de Adobe y toda su plataforma Flash, o al menos, ponerle en serios aprietos. Y es que si hubieran hecho coincidir el lanzamiento de Windows Vista con el de Silverlight (la respuesta de Microsoft a Flash), además de añadir soporte nativo para este en Internet Explorer 7 olvidando, casualmente, incluir el plugin para flash, hubieran conseguido, prácticamente de la noche a la mañana, millones de usuarios de Silverlight.
No me malinterpretéis, me alegro. Prefiero una competencia mas limpia, un combate uno contra uno, cuyas únicas armas sean las que proporcione el software en cuestión, y no una batalla desigual en la que uno de los púgiles, silverlight, decida llamar a su primo de zumosol, windows. Sin embargo, no entiendo porqué Microsoft ha dejado escapar esta oportunidad.